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Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo
Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo
Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo
Israel González Élan
Israel González Élan
9
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10
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2025
-
15
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11
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2025
CURADURÍA -  
Eduardo Luque
CURATED BY -  
Eduardo Luque
Casa Hotbook

Monte Líbano 280, Lomas de Chapultepec

Casa Hotbook y Galería Hilario Galguera presentan Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo, una  exposición del artista Israel González Élan, curada por Eduardo Luque. La muestra es, en esencia, un  recorrido a través de umbrales sutiles; un tránsito entre dualidades que convergen en una misma  unidad. Un susurro de espiritualidad y esoterismo envuelve cada pieza, conectando al espectador con  las energías que habitan tanto en lo visible como en lo oculto. 

El título de la muestra es a su vez su idea más poderosa. Aquí, el rito se convierte en un puente que disuelve  las fronteras entre el “yo” y el universo. Es un recordatorio de que en nuestra singularidad reside la conexión  con el todo, abriendo caminos hacia la sanación y la expansión de la conciencia. 

En un mundo que nos impulsa a buscar respuestas afuera, la obra de Israel González Élan nos invita a un  viaje interior. Nos recuerda que la fuerza, la creatividad y la sabiduría ya habitan en nosotros. El verdadero  camino es hacia nuestro ser, donde el arte y el autoconocimiento se encuentran. 

Los materiales se transforman en portales. Un espejo deja de ser un simple reflejo para devolvernos nuestra  propia presencia, fundiéndonos con la obra. El artista transita con maestría entre disciplinas, creando un  lenguaje propio a través de esculturas en acero, mármol y aluminio; vibrantes neones y lienzos que dialogan  con el espacio de Casa Hotbook. 

Símbolos como los papalotes encarnan la unión entre el cielo y la tierra. Elevan nuestros deseos y memorias,  siempre anclados por un hilo: esa conexión invisible con nuestras raíces, con la tierra que nos sostiene. La  naturaleza no es solo un recurso, sino un ser vivo con el que debemos mantener el equilibrio. 

Israel González Élan nos propone una cartografía interior. Sus piezas habitan la arquitectura de Casa  Hotbook, resignificando sus rincones y creando un recorrido donde el espacio mismo se vuelve parte del  mapa. Este nos lleva desde lo más profundo de nuestro ser hacia lo más alto, como un papalote que asciende  al cielo, pero siempre con el hilo del presente, del cuerpo, de lo real. 

Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo ofrece un recorrido que oscila entre lo terrenal y lo trascendente, recordándonos que en la contemplación de lo natural se encuentra también una vía de reflexión sobre nuestra existencia. La exposición inaugurará el 9 de octubre y permanecerá abierta al público hasta el 15 de noviembre de 2025 en el espacio de Casa Hotbook, Ciudad de México.

Casa Hotbook y Galería Hilario Galguera presentan Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo, una  exposición del artista Israel González Élan, curada por Eduardo Luque. La muestra es, en esencia, un  recorrido a través de umbrales sutiles; un tránsito entre dualidades que convergen en una misma  unidad. Un susurro de espiritualidad y esoterismo envuelve cada pieza, conectando al espectador con  las energías que habitan tanto en lo visible como en lo oculto. 

El título de la muestra es a su vez su idea más poderosa. Aquí, el rito se convierte en un puente que disuelve  las fronteras entre el “yo” y el universo. Es un recordatorio de que en nuestra singularidad reside la conexión  con el todo, abriendo caminos hacia la sanación y la expansión de la conciencia. 

En un mundo que nos impulsa a buscar respuestas afuera, la obra de Israel González Élan nos invita a un  viaje interior. Nos recuerda que la fuerza, la creatividad y la sabiduría ya habitan en nosotros. El verdadero  camino es hacia nuestro ser, donde el arte y el autoconocimiento se encuentran. 

Los materiales se transforman en portales. Un espejo deja de ser un simple reflejo para devolvernos nuestra  propia presencia, fundiéndonos con la obra. El artista transita con maestría entre disciplinas, creando un  lenguaje propio a través de esculturas en acero, mármol y aluminio; vibrantes neones y lienzos que dialogan  con el espacio de Casa Hotbook. 

Símbolos como los papalotes encarnan la unión entre el cielo y la tierra. Elevan nuestros deseos y memorias,  siempre anclados por un hilo: esa conexión invisible con nuestras raíces, con la tierra que nos sostiene. La  naturaleza no es solo un recurso, sino un ser vivo con el que debemos mantener el equilibrio. 

Israel González Élan nos propone una cartografía interior. Sus piezas habitan la arquitectura de Casa  Hotbook, resignificando sus rincones y creando un recorrido donde el espacio mismo se vuelve parte del  mapa. Este nos lleva desde lo más profundo de nuestro ser hacia lo más alto, como un papalote que asciende  al cielo, pero siempre con el hilo del presente, del cuerpo, de lo real. 

Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo ofrece un recorrido que oscila entre lo terrenal y lo trascendente, recordándonos que en la contemplación de lo natural se encuentra también una vía de reflexión sobre nuestra existencia. La exposición inaugurará el 9 de octubre y permanecerá abierta al público hasta el 15 de noviembre de 2025 en el espacio de Casa Hotbook, Ciudad de México.

Casa Hotbook and Galería Hilario Galguera present Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo, an  exhibition by artist Israel González Élan, curated by Eduardo Luque. The show is, in essence, a journey  through subtle thresholds; a passage between dualities that converge into a single unity. A whisper  of spirituality and esotericism surrounds each piece, connecting the viewer with energies inhabiting  both the visible and the hidden. 

The title of the exhibition is also its most powerful idea. Here, ritual becomes a bridge that dissolves the  boundaries between the “self” and the universe. It is a reminder that within our individuality lies the  connection to the whole, opening pathways toward healing and the expansion of consciousness. 

In a world that urges us to seek answers outside ourselves, the work of Israel González Élan invites us to  embark on an inner journey. It reminds us that strength, creativity, and wisdom already dwell within us. The  true path is towards our inner being, where art and self-knowledge converge. 

Materials are transformed into portals. A mirror ceases to be a mere reflection and instead returns us to our  own presence, merging us with the artwork. The artist masterfully navigates between disciplines, creating a  unique language through sculptures in steel, marble, and aluminum; vibrant neon works, and canvases that  dialogue with the Casa Hotbook space. 

Symbols such as kites embody the union between sky and earth. They elevate our desires and memories,  always anchored by a thread: that invisible connection with our roots, with the land that sustains us. Nature  is not merely a resource, but a living being with whom we must remain in balance. 

Israel González Élan proposes an inner cartography. His pieces inhabit the architecture of Casa Hotbook,  re-signifying its corners and creating a journey where the space itself becomes part of the map. This path  leads us from the depths of our being to the heights, like a kite ascending to the sky but always tethered by  the thread of the present, the body, the real. 

Yo soy tanto yo mismo como soy parte de todo offers a journey oscillating between the earthly and the transcendent, reminding us that in the contemplation of nature we can also find a way to reflect on our own existence. The exhibition will open on October 9 and remain on view until November 15, 2025, at Casa Hotbook, Mexico City.

Israel González Élan

Israel González Élan es un artista con base en la Ciudad de México, Israel posee una sólida formación en Diseño Gráfico y una Maestría en Comunicación Visual. Su práctica artística se caracteriza por la fusión de técnicas como la pintura, la serigrafía, el grabado, la escultura y el collage, utilizando como cromática recurrente el azul ultramarino. Este color lo conecta con el mar y las profundidades del inconsciente, a la vez que representa la libertad del cielo azul.

En sus obras, Israel busca crear un balance entre las fuerzas opuestas de la naturaleza, transmitiendo significados reflexivos y restaurando el vínculo perdido con el universo. Las influencias de Israel se extienden a diversos sistemas de pensamiento y tradiciones, incluyendo la alquimia, la metafísica y el pensamiento esotérico. Estas influencias dan lugar a un enfoque artístico intencionalmente intuitivo y experimental.

Su obra ha sido expuesta institucionalmente en lugares como: Contemporaine De L’art Mexicain, Gallery AU, Paris, Francia (2022); Conjuros Cósmicos, LOOT, México (2022); Biennale di Venezia, Fondazi- one Amadeo Modigliani, Venezia, Italia (2021); México de Mil Colores, Casa Decor, Madrid España (2021); Latin Art Show, Cadena Gallery, EUA, Chelsea New York (2019); entre otros.

Israel González Élan es un artista con base en la Ciudad de México, Israel posee una sólida formación en Diseño Gráfico y una Maestría en Comunicación Visual. Su práctica artística se caracteriza por la fusión de técnicas como la pintura, la serigrafía, el grabado, la escultura y el collage, utilizando como cromática recurrente el azul ultramarino. Este color lo conecta con el mar y las profundidades del inconsciente, a la vez que representa la libertad del cielo azul.

En sus obras, Israel busca crear un balance entre las fuerzas opuestas de la naturaleza, transmitiendo significados reflexivos y restaurando el vínculo perdido con el universo. Las influencias de Israel se extienden a diversos sistemas de pensamiento y tradiciones, incluyendo la alquimia, la metafísica y el pensamiento esotérico. Estas influencias dan lugar a un enfoque artístico intencionalmente intuitivo y experimental.

Su obra ha sido expuesta institucionalmente en lugares como: Contemporaine De L’art Mexicain, Gallery AU, Paris, Francia (2022); Conjuros Cósmicos, LOOT, México (2022); Biennale di Venezia, Fondazi- one Amadeo Modigliani, Venezia, Italia (2021); México de Mil Colores, Casa Decor, Madrid España (2021); Latin Art Show, Cadena Gallery, EUA, Chelsea New York (2019); entre otros.

Israel González Élan is an artist based in Mexico City, Israel has a solid background in Graphic Design and a Masters in Visual Communication. His artistic practice is characterized by the fusion of techniques such as painting, silkscreen printing, engraving, sculptureand collage, using ultramarine blue as a recurring chromatic. This color connects him with the sea and the depths of the unconscious, while representing the freedom of the blue sky.

In his works, Israel seeks to create a balance between the opposing forces of nature, conveying reflective meanings and restoring the lost link with the universe. Israel's influences extend to diverse systems of thought and traditions, including alchemy, metaphysics and esoteric thought. These influences result in an intentionally intuitive and experimental artistic approach.

His work has been exhibited institutionally in venues such as: Contemporaine De L'art Mexicain, Gallery AU, Paris, France (2022); Conjuros Cósmicos, LOOT, Mexico (2022); Biennale di Venezia, Fondazi- one Amadeo Modigliani, Venezia, Italy (2021); México de Mil Colores, Casa Decor, Madrid Spain (2021); Latin Art Show, Cadena Gallery, USA, Chelsea New York (2019); among others.

TEXTO CURATORIAL
/ Por

La muestra se revela a través de umbrales sutiles, invitando a transitar entre dualidades que convergen en una misma unidad armoniosa. Un susurro de espiritualidad y esoterismo envuelve el recorrido, conectando al espectador con las energías que habitan en lo visible y lo oculto. El título de la exposición es, a su vez, su esencia: un reconocimiento de la conexión profunda del individuo con el universo. 

En estos momentos sagrados, el rito se convierte en un puente que une la identidad personal con la totalidad cósmica, disolviendo las fronteras entre el “yo” y el “todo”. Esta afirmación nos invita a mirar hacia adentro, reconociendo que las respuestas y la fuerza no se encuentran en el exterior, sino en nuestro propio interior. Israel González Élan nos recuerda que el verdadero viaje es hacia nuestro ser, donde el arte y el autoconocimiento convergen para redescubrir aquello que siempre estuvo en el núcleo de nuestra propia existencia. Nosotros mismos. 

Las obras transforman lo visible en experiencia sensorial. En este universo simbólico, el espejo no solo refleja el mundo, sino que devuelve al espectador su propia presencia, fundiéndose con la pieza. Con naturalidad, el artista transita entre disciplinas, trazando un lenguaje propio que se despliega en esculturas de acero, aluminio y mármol, o en la luz vibrante de los neones. 

Los papalotes, más que juego y viento, son símbolos vivos de la unión entre el cielo y la tierra. Elevan deseos y pensamientos, siempre anclados por un hilo: esa conexión invisible con la raíz, con lo que somos. La tierra, entendida no como recurso sino como ser vivo, nos recuerda el equilibrio necesario para que ese hilo no se rompa. 

Así, la obra de Israel González Élan plantea una visión donde la naturaleza es un lenguaje sagrado que nos conecta con lo esencial. Sus piezas habitan e intervienen la arquitectura de Casa Hotbook, trazando una cartografía interior que nos lleva desde lo más profundo de nosotros hacia lo más alto, como un papalote que asciende al cielo, pero siempre con el hilo del presente, del cuerpo, de lo real.

La muestra se revela a través de umbrales sutiles, invitando a transitar entre dualidades que convergen en una misma unidad armoniosa. Un susurro de espiritualidad y esoterismo envuelve el recorrido, conectando al espectador con las energías que habitan en lo visible y lo oculto. El título de la exposición es, a su vez, su esencia: un reconocimiento de la conexión profunda del individuo con el universo. 

En estos momentos sagrados, el rito se convierte en un puente que une la identidad personal con la totalidad cósmica, disolviendo las fronteras entre el “yo” y el “todo”. Esta afirmación nos invita a mirar hacia adentro, reconociendo que las respuestas y la fuerza no se encuentran en el exterior, sino en nuestro propio interior. Israel González Élan nos recuerda que el verdadero viaje es hacia nuestro ser, donde el arte y el autoconocimiento convergen para redescubrir aquello que siempre estuvo en el núcleo de nuestra propia existencia. Nosotros mismos. 

Las obras transforman lo visible en experiencia sensorial. En este universo simbólico, el espejo no solo refleja el mundo, sino que devuelve al espectador su propia presencia, fundiéndose con la pieza. Con naturalidad, el artista transita entre disciplinas, trazando un lenguaje propio que se despliega en esculturas de acero, aluminio y mármol, o en la luz vibrante de los neones. 

Los papalotes, más que juego y viento, son símbolos vivos de la unión entre el cielo y la tierra. Elevan deseos y pensamientos, siempre anclados por un hilo: esa conexión invisible con la raíz, con lo que somos. La tierra, entendida no como recurso sino como ser vivo, nos recuerda el equilibrio necesario para que ese hilo no se rompa. 

Así, la obra de Israel González Élan plantea una visión donde la naturaleza es un lenguaje sagrado que nos conecta con lo esencial. Sus piezas habitan e intervienen la arquitectura de Casa Hotbook, trazando una cartografía interior que nos lleva desde lo más profundo de nosotros hacia lo más alto, como un papalote que asciende al cielo, pero siempre con el hilo del presente, del cuerpo, de lo real.

The exhibition unfolds through subtle thresholds, inviting us to move between dualities that converge into a single harmonious unity. A whisper of spirituality and esotericism envelops the journey, connecting the viewer with the energies that inhabit both the visible and the hidden. The title of the exhibition is, in turn, its very essence: an acknowledgment of the profound connection between the individual and the universe. 

In these sacred moments, ritual becomes a bridge that unites personal identity with cosmic totality, dissolving the boundaries between “the self” and “the whole.” This affirmation invites us to look inward, recognizing that strength and answers are not found outside, but within. Israel González Élan reminds us that the true journey is towards our inner being, where art and self-knowledge converge to rediscover what has always been at the core of our own existence. Ourselves. 

The works transform the visible into sensorial experience. In this symbolic universe, the mirror does not merely reflect the world, but returns the spectator to their own presence, merging them with the piece. With natural ease, the artist moves between disciplines, creating a personal language that unfolds in steel, aluminum, and marble sculptures, as well as in the vibrant light of neons. 

The kites, more than mere play and wind, are living symbols of the union between sky and earth. They elevate desires and thoughts, always anchored by a thread: that invisible connection with the root, with who we are. The earth, understood not as a resource but as a living being, reminds us of the balance needed so that the thread does not break. 

Thus, the work of Israel González Élan proposes a vision where nature is a sacred language that connects us with what is essential. His pieces inhabit and intervene in the architecture of Casa Hotbook, drawing an inner cartography that carries us from our deepest core to the highest realm, like a kite ascending into the sky, yet always held by the thread of the present, the body, the real.

obras en esta exposición
WORKS IN THE SHOW
Israel González Élan

Módulo de Acontecimiento Crómatico - 007

De la serie
From the series
2023
Ultra violet paint on aluminum mounted on birch frame and polished steel frame
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200 x 122 cm
Pintura ultra violeta sobre aluminio montado en bastidor de abedul y marco de acero pulido
200 x 122 cm
Israel González Élan

Aluminium

De la serie
From the series
2021
Archival pigment print on corona rag paper
Archival pigment print on corona rag paper
150 x 110 cm
Impresión con pigmentos de archivo sobre papel de corona
150 x 110 cm
Israel González Élan

Todo se mueve todo vibra

De la serie
From the series
2024
Tikal marble, green forest, brown forest, black angola granite, venezia and bright platinum quartz
Tikal marble, green forest, brown forest, black angola granite, venezia and bright platinum quartz
120 x 73 cm
Mármol tikal, bosque verde, bosque café, granito negro angola, venezia y cuarzo brillante platino
120 x 73 cm
Vistas de sala
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